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"Gracias a KDP, hoy soy un autor profesional que mira al futuro con optimismo".
Fernando Gamboa, autor de La última cripta
"La verdad es que no me aburría", dice Fernando Gamboa sobre su vida antes de convertirse en escritor. A los 20 años, este barcelonés comenzó a viajar y vivir en países lejanos, inspirado por las historias de Verne, Kipling o Salgari que leía de niño. Fue exportador de artesanía en Guatemala, propietario de un par de escuelas en Honduras, submarinista, agente de viajes... "Hasta que un día decidí escribir mis propias novelas, en las que recrear tanto las aventuras vividas como las imaginadas", explica. Actualmente, Fernando vive su sueño de ser un autor de éxito. Y los clientes de Amazon.es han tenido mucho que ver en eso.
"Profesionalmente, llevo dedicándome a esto de darle a la tecla desde 2007, cuando La última cripta fue publicada por una editorial española y traducida a varios idiomas". La primera novela de Fernando, que entrelaza enigmas históricos con aventuras y viajes a parajes exóticos, se convirtió en un best-seller en Rusia, Grecia e Italia, pero paradójicamente no en España.
Cuando estalló la crisis, la situación no hizo sino empeorar. "Durante los años siguientes, mi agente trató de vender mis nuevas obras a editoriales tradicionales, las cuales no mostraban demasiado interés". Así las cosas, Fernando acabó añadiendo un trabajo más (jugador de póker) a su larga lista de empleos, mientras seguía escribiendo sin perder la esperanza de triunfar en su tierra: "No entendía cómo podía ser que mis libros fueran un éxito de ventas en sus traducciones a otros idiomas, pero que en España no hubiera editoriales interesadas en publicarme. Era algo muy desconcertante".
Todo esto cambió cuando Fernando descubrió la posibilidad de poner sus obras a disposición de los lectores de forma directa con Kindle Direct Publishing (KDP). "Al cabo de pocos meses de comenzar a publicar mis novelas en Amazon.es, empecé de nuevo a ganar lo suficiente como para dedicarme a escribir de forma exclusiva". La última cripta está siendo traducida ahora también al inglés, y los libros de Fernando suman ya más de 200.000 ejemplares vendidos. "Es el mayor premio literario al que puede aspirar un escritor".
"Trepidante", "aventuras en estado puro", "diálogos chispeantes", "imposible parar de leer"... son algunas de las opiniones de los lectores en Amazon.es. Las novelas de Fernando han conquistado a los clientes de Amazon, donde es uno de los autores más vendidos y comentados. Además, los derechos de sus dos obras de mayor éxito, La última cripta y Ciudad Negra, han sido adquiridos por Ediciones B, que las publicará en papel estas próximas navidades.
"Gracias a las herramientas de Amazon KDP y CreateSpace, que me ofreció la posibilidad de distribuir mis libros en papel sin intermediarios, mis novelas están por fin disponibles en español. Esto me ha permitido ser descubierto por decenas de miles de lectores no sólo de este país, sino también del resto del mundo", dice Fernando, que disfruta del contacto directo con los lectores a través de las redes sociales: "es algo que no tiene precio para un artista con una profesión tan solitaria como la de escritor".
Mientras da los últimos retoques a su próxima novela de aventuras titulada Capitán Riley, ambientada en la Segunda Guerra Mundial, este escritor aventurero afirma: "gracias a KDP, he tomado el control sobre mi carrera y hoy soy un autor profesional que mira al futuro con optimismo. Ya no pienso en otra cosa que no sea seguir escribiendo y disfrutar de esta profesión tan difícil como satisfactoria".
"Cuando le cuento toda esta experiencia a mi madre, que también hizo sus intentos como escritora en su juventud, me mira como si fuese un marciano".
J. L. Rod, autor de La suerte de los irlandeses
"Buscaba hacer algo diferente", afirma J.L. Rod sobre su novela. Sin embargo, podría estar hablando también sobre su vida y su oficio. J.L. vive a caballo entre Madrid, Cádiz y California, dedicado a editar y analizar guiones de cine y televisión y, desde noviembre pasado, a relatar las historias del detective Pat MacMillan. Gracias a los clientes de Amazon, este escritor novel y su ficticio y malhablado agente del Centro Nacional de Inteligencia (CNI) han encontrado la vía para planear a lo grande las trepidantes historias de acción e intriga que atraen a miles de lectores.
La suerte de los irlandeses, el título de su primer libro, parece acompañarlos a ambos: la historia de su publicación tiene un giro tan inesperado como el final de su propia novela negra.
La historia de Pat MacMillan y J.L. Rod comienza en un misterioso albergue del Camino de Santiago, donde el escritor escuchó un relato similar de un camarero. Este último, ex guardia civil, desapareció al día siguiente en extrañas circunstancias.
"Como todo escritor novel, envié mi obra a diversas editoriales. Tres meses después no había recibido la más mínima respuesta". J.L. Rod relata así su primer intento de publicación. Tras insistir y poder hablar con un editor descubrió una realidad que le sorprendió: "Reciben del orden de 400 novelas mensuales y les resulta materialmente imposible leerlas todas. El saber que mi novela probablemente jamás sería leída por ninguna editorial me dejó en estado de shock".
La situación se tornaba oscura para Pat MacMillan, también fuera de la trama ficticia. J.L. Rod había invertido más de dos años en documentar y escribir esta primera entrega, y ahora temía que su novela acabara "apilada en una estantería".
Pero J.L. Rod consiguió una pista alternativa, afortunadamente sin tener que recurrir a los métodos de MacMillan: decidió utilizar el servicio de autopublicación gratuita de Amazon, Kindle Direct Publishing, y en 24 horas su novela estaba disponible para los lectores de todo el mundo. Al descubrir un día después que había vendido 50 ejemplares, comenta que se le quedó "la misma cara que debió de poner el primer Homo Erectus cuando descubrió el fuego".
Ahora, tras ocho meses en el top ventas de Kindle en Amazon.es y miles de ejemplares vendidos en decenas de países diferentes, J.L. Rod prepara una saga de siete libros y una serie televisiva. Además, ha firmado por una importante editorial española para publicar en papel sus próximas novelas.
En septiembre estará disponible la próxima entrega de La suerte de los irlandeses, tanto en Kindle como en edición impresa. "Te mantiene en vilo desde el principio" y "Si Philip Marlowe y John McClane tuvieran un hijo español, sería Pat MacMillan" son dos de los cientos de comentarios recibidos por parte de los lectores. La trama, que incluye un terrorista de ETA infiltrado en el CNI, es el punto fuerte para muchos. Otros subrayan las memorables frases del protagonista, su personalidad y profundidad. Pat MacMillan es un antihéroe políticamente incorrecto, faltón y a veces un tanto grosero, que no tiene tapujos a la hora de saltarse la ley.
"Escribir una novela y que miles de personas de todos los países del mundo puedan leer tu obra 24 horas después de finalizarla es magia en estado puro. Cuando le cuento toda esta experiencia a mi madre, que también hizo sus intentos como escritora en su juventud, me mira como si fuese un marciano". El autor relata así la experiencia que ha cambiado su vida, replanteando su futuro para poder hacer realidad su sueño de dedicarse a la escritura. Con la ayuda de la autopublicación y la confianza de los lectores, J.L. Rod parece estar escribiendo un final feliz a su apasionante historia.
"Los únicos jueces son los lectores. Así es como debería ser.
Keith Houghton, autor de Killing Hope
Llevaba 30 años llamando a la puerta de los editores antes de que Kindle Direct Publishing me abriera las suyas. Como la mayoría de los aspirantes a escritor profesional, consideraba la autopublicación como un sector anticuado y con manchas de alcanfor. Me mantenía firme en mi decisión de seguir el camino que va del agente tradicional al editor, repleto de callejones sin salida y notas de rechazo. Ingenuamente, estaba convencida de que si mis obras eran lo bastante buenas, se venderían bien. Con lo que no contaba era con tener todas las papeletas en mi contra. Conseguir un agente, abrir las puertas de un editor... eran demasiadas cosas, todas ellas fuera de mi control, que tenían que alinearse correctamente. La clave era encontrar un agente que creyera en mi trabajo. Tardé tres décadas y decenas de cartas esperanzadoras en poner un pie en la puerta, e incluso entonces se cerró en el último paso.
Creo que todo sucede por un motivo. Rompí con lo convencional y me dirigí a KDP. El Kindle era la nueva estrella del baile. Ofrecía a desconocidos como yo un medio de poner mi obra ante los lectores en un abrir y cerrar de ojos. Pero no sabía que esperar. Amazon estaba a punto de dar un lavado de cara a la autopublicación, revolucionando la lectura de la misma forma que la gramola popularizó la música. Era emocionante pero atemorizador. ¿Qué pasaría si no funcionaba? ¿Qué pasaría si era una moda pasajera? Las personas no me creen cuando les digo que soy tímido. La idea de exponer mi obra al escrutinio público era aterradora. Peor que eso, la idea de no vender un solo libro significaba enfrentarse a una dura realidad.
Apreté los dientes y lancé mi primera novela policiaca, Killing Hope, con KDP en noviembre de 2011. Resultó ser la mejor decisión profesional que he tomado nunca.
En dos meses, Killing Hope había llegado al Top 20 en la tienda Kindle de los Estados Unidos y alcanzó el número 1 en su categoría a nivel internacional. Las ventas superaban todas mis expectativas. Mejor todavía, estaba recibiendo muchas reseñas de lectores, que utilizaría para dar forma a mis futuros libros.
¡Y me tiraba de los pelos por no haberme atrevido a hacerlo antes! He abandonado mi trabajo y ahora escribo a tiempo completo. La versatilidad de KDP significa que puedo editar mis libros, actualizar sus estadísticas y elegir promociones de precios a mi antojo. KDP Select es como tener mi propio publicista trabajando a tiempo completo entre bastidores y sin pagar un céntimo. La inscripción en KDP Select nos abrió nuevas puertas a mí y a mis libros. No solo puedo programar promociones de libros gratis para ayudar a impulsar las ventas; además, mis libros pueden obtener más regalías en préstamos a través de la Biblioteca de préstamos de Kindle. Para escritores como yo, es la opción perfecta. Realizar promociones de regalo de KDP con mis novelas sobre Gabe Quinn les concedió una exposición inigualable, que generó un cuarto de millón de descargas en todo el mundo, cien mil de las cuales fueron ventas de pago.
Tengo un control completo sobre mi carrera como escritor. Además, recibo un porcentaje de regalías inimaginable en el resto del mundo de la publicación. Pero quizás el mejor favor que me haya hecho KDP es la ausencia del esnobismo literario. Cualquier persona que tenga una historia que contar puede publicarla y tener personas leyéndola al otro lado del mundo al día siguiente.
Los únicos jueces son los lectores. Así es como debería ser.
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